Capítulos anteriores:
Capitulo 1 - Prologo.
Capitulo 2 - ¿La advertencia?
Capitulo 3 - Base Lunar.
Capitulo 4 - Seguridad.
Capitulo 5 - VF-5000 Star Mirage.
Capitulo 6 - Los Tri-Star.
Capitulo 7 - Guerra.
Después de la batalla contra los
Tri-Star es que Kara quedo aún más irascible, su rendimiento en las pruebas
disminuyo dramáticamente. De hecho se volvió huraña con casi todos. Cada vez
que salía en su VF, se notaba el gran enfado que le había provocado el haber
sido derrotada por Kunestov.
Al principio pensé que se le
pasaría, pero no fue así. Entonces a riesgo de mi vida, fue que tome cartas en
el asunto. Como de costumbre volvió de una de las prácticas, llevo su VF hasta
su lugar en el hangar y descendió de este. Tomo la Tablet que llevaba consigo
Yang, la cual resumía el desempeño de la práctica. Furiosa lanzo su casco
contra el suelo, rompiendo el visor. Me acerque y tome este del suelo.
— Con
este ya son cinco los que rompes — le dije a Kara.
— ¡¿A ti que te importa?! — me respondió furiosa, lo cual
provoco que me diera un pequeño pasmo del susto.
— Kara… es que no está bien que cada vez que sales es
siempre lo mismo, regresas hecha un energúmeno. Si te calmaras, estoy seguro de
que volverías a pilotear como… como lo haces normalmente.
Dude en esa última parte, pues
estuve a punto de decir que antes de que Kunestov la derrotara. Pude decir otra
cosa a tiempo, para evitar exacerbar aún más la furia rampante de Kara. Ella no
dijo nada, tan solo le devolvió la Tablet a Yang y se retiró.
— ¿Tú
crees que vuelva a ser como antes? Así no nos sirve de nada — me dijo Yang.
— Tiene que. Sabes Yang, empiezo a creer que toda esto de
Kara tiene que ver con su parte Zentran, si se calmar un poco, tal vez
podríamos volver a las pruebas de antes.
— Entonces creo que deberás de apelar a su lado humano
Isacc.
— Tenme más respeto y no me tutes Yang — le dije al tiempo
que le daba un golpe en la nuca.
Aun así, la idea de Yang no era
mala. Después de todo era bien sabido que los zentraedi eran de carácter fuerte
y terco, esto los hacia unos combatientes formidables, pero también era su
debilidad, pues cuando perdían la confianza, les era muy difícil el
controlarse. Sin embargo Kara no solo era zentraedi, también era una humana…
valía la pena intentarlo.
Después de ello, es que la busque
por toda la base. Su camarote, el comedor, los simuladores, la armería, ¡vamos!
Hasta fui al hangar del Ícaro y nada… ¿Dónde se podría haber metido esa mujer?
Entonces lo recordé, ella se sentía atraída por el observatorio de la base. Me
dirigí a este, y efectivamente allí estaba sentada, observando el exterior,
mirando al horizonte de nuestro paisaje lunar, lleno de cráteres, piedras y
polvo, adornado por un manto negro, con puntos de titilaban a la distancia.
Me acerque con mucha cautela,
después de todo a la mala había aprendido que era una pésima idea el intentar
sorprender a una zentraedi. Manteniendo mi distancia es que le grite por su
nombre. Esta se giró y me vio, sus ojos estaban vacíos, con una completa
ausencia de emociones.
— ¿Te
sientes bien? — le dije, pero no obtuve respuesta —
¿Puedo sentarme a tu lado?
Se me quedo viendo y después de
un rato de verme con aquellos vacíos ojos es que me respondió. Tras lo cual
recobraron algo de vida.
—
¡Haz lo que quieras!
Me senté a su lado, y me le quede
viendo, mientras ella mantenía su mirada fija en el exterior. Saque de mi
bolsillo un paquete de goma de mascar. Le ofrecí un poco a ella, y después de
mirarme un tanto ofendida, es que me arrebato todo el paquete. Tomo dos y los
empezó a mascar.
—
¿Puedo preguntarte porque estas tan furiosa?
—
¡No lo sé!
—
¿Cómo que no lo sabes?
Kara no me volvió a responder, y
pensé que continuar sería inútil, por lo cual decidí retirarme, pero en ese
instante me obligo a sentarme de nuevo a su lado, tirando de mi bata. Siguió
sin decir nada, pero al parecer tampoco quería estar sola. Pasados unos minutos
es que por fin se sacó la goma de mascar y la envolvió en uno de los empaques usados.
Se dejó caer de espaldas, recostándose en el suelo.
— La verdad — por fin empezó a decir Kara — es que no me
molesta tanto el hecho de haber sido derrotada. Sé que no soy indestructible,
lo que me molesta es que quien lo hizo me ha hecho el objeto de su burla por el
solo hecho de tener algo de ascendencia zentraedi. Puedo aceptar la derrota…
pero no la persona que me la infringió.
— ¿Y esa es la razón por la cual sales cada vez hecha una
furia?
— En parte… la verdad es que me cuesta mucho trabajo
controlar mi temperamento zentraedi. Usualmente yo no soy así, suelo ser
tranquila… pero desde la muerte de todos mis compañeros, bueno, mi humor no ha
vuelto a ser el mismo, y el hecho de estar encerrada con una bola de locos como
ustedes no me ayuda a sentirme mejor.
— Pero tú no eres enteramente zentraedi, también eres
humana — intente explicar.
De
nuevo se volvió a quedar callada, y después de un rato se volvió a sentar.
Sonrió irónicamente antes de continuar.
— Tal vez mi lado humano también está enfadado, y por eso
no he logrado calmarme.
— Deberías de intentarlo.
— Se dice fácil, pero no sé cómo mejorar mi humor.
— En este momento te vez más tranquila.
Muy
lentamente se giró para verme a los ojos. Se notaba molesta, pero bueno, al
menos ya no estaba furiosa. Y justo cuando creí que me molería a golpes,
comenzó a reír. Me quede sorprendido de aquello, era la primera vez que
escuchaba la risa de Kara. Cuando por fin pudo detener su risa es que se
dirigió a mí.
— Sabes, probablemente lo que me hacía falta era hablar.
— ¿Eso quiere decir que te sientes mejor? — le dije
mientras mantenía mis manos en alto para defenderme de un inminente ataque de
Kara
— Si, podrías decir que sí.
Inmediatamente se puso de pie, y
comenzó a estirarse, con una sonrisa en la cara. Era tan raro verla así, en un
sentido me daba miedo el ver como de repente estaba tan alegre. ¿Se trataba
acaso de esta de la verdadera Kara? Me ofreció la mano para ayudarme a
levantar, pero justo cuando estuve por impulsarme para hacer mi movimiento, es
que ella retiro su mano provocando que me tropezara bocabajo.
Lo que hizo que Kara retirara su
mano se debió a que comenzó a sonar la alarma en la base. Seguido de un anuncio
de Andrés que ordenaba que todo el mundo se presentara en el salón de
conferencias. Kara y yo fuimos hasta haya, y al llegar ya estaba la mayor parte
del personal allí. Vi entre la multitud a Yang y nos acercamos a él.
— ¡Yang!, ¿sabes que es lo que está pasando? — dijo Kara.
— La verdad se tanto como ustedes. El mayor aún no ha
llegado…
Yang no pudo terminar de
informarnos, cuando este fue empujado por Ford. Kara se contuvo de armar un
escándalo en ese momento, por lo cual solo se quedó apretando su puño, al
tiempo que le veía alejarse junto con Annie. De repente el salón se oscureció y
una intensa luz se alumbro en la tarima, donde se podía observar a Andrés
sosteniendo una Tablet. Tenía la cara muy seria, lo cual era extraño en él.
—
Bien… creo que es la primera vez que hacemos
esto, reunirnos todos para un informe. La verdad es que… las cosas no pintan bien.
Hace aproximadamente 13 horas una patrulla en Júpiter tuvo un encuentro con una
flota zentraedi… desafortunadamente no se trata de algún grupo pequeño de
renegados. Estamos hablando de una fuerza de combate como no habíamos visto
desde los días de la guerra espacial. El cálculo hasta ahora es de 2 millones
de naves, son más naves de lo que hay en la flota lunar o la flota de guardia
terrestre. Afortunadamente se han mantenido en la órbita de Júpiter, pero en
cualquier momento podrían comenzar su avance a la Tierra. Es por ello que la UN
Spacy ha ordenado una movilización completa de todos los recursos del sistema
solar. Eso nos incluye a nosotros.
Empezaron a haber murmuraciones
en todo el salón, y no era para menos. Una fuerza de 2 millones de naves… era
demasiado. Aunque durante la guerra espacial estábamos menos preparados de lo
que estábamos ahora… y además tal vez podríamos ganar esta guerra con ayuda de
la música de Minmey.
Andrés intento calmar a todo
mundo y cuando por fin lo logro, prosiguió con el reporte.
—
Es por esa movilización general que se ha
ordenado a la flota de guardia terrestre que se una con la flota lunar, y de
allí se movilicen a Júpiter, o donde el enemigo se mueva, y lo reduzcan y
rindan con un ataque Minmey… y si esto no es posible, entonces exterminar al
enemigo. Nosotros reabasteceremos a la flota de guardia terrestre una vez estén
aquí. Y probablemente recibiremos a algunos oficiales de alto mando que estarán
aquí para planear la acción adecuada — Andrés se
detuvo en ese momento e intento mirar las caras de todos — yo sé que somos
vistos como los parias, pero la UN Spacy nos ha dado una orden y debemos de
cumplirla. No estaremos en la primera línea de fuego, pero recuerden que es
usual en los zentraedi enviar grupos de ataque por delante de la fuerza
principal, y uno de estos grupos podría atacar aquí, ya que será el punto de
reunión de nuestras fuerzas. Por eso quiero que todos estén listos para
defender esta base. Porque damas y caballeros, háganse a la idea de que
oficialmente estamos en guerra.
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